El volteado de durazno es un pastel suave con una deliciosa cubierta de duraznos caramelizados. Es muy sencillo de preparar y perfecto para utilizar la fruta de temporada.
Calentar el horno a 360°F/180°C. Engrasar y forrar con papel de horno un molde para bizcocho de 9"(20cm) de diámetro.
Lavar los duraznos, secarlos y cortarlos en gajos. Cubrir el fondo del molde con estos.
En un cazo pequeño poner media taza de azúcar y el agua, llevar a ebullición y moderar la flama a media-baja.
Dejar cocinar moviendo de vez en cuando el cazo por 8-10 minutos o hasta obtener un caramelo ligeramente amarillo y sin grumos.
Bañar los duraznos con el caramelo cubriéndolos bien.
Cernir la harina junto con la levadura y el bicarbonato. Reservar.
En un cuenco grande poner la mantequilla y el resto del azúcar. Batir hasta que la mantequilla este casi blanca y esponjada.
Agregar los huevos, uno a la vez y dejando que se absorban en la crema antes de echar el siguiente.
Agregar la ralladura de limón, la sal y el extracto de vainilla, batir por un minuto.
Unir la harina y continuar batiendo por uno o dos minutos más hasta que no hayan grumos.
Poner la mezcla sobre los duraznos y emparejarla con una espátula.
hornear de 45 a 60 minutos o hasta que pase la prueba del palillo.
Sacar el bizcocho del horno, ponerlo encima de una parrilla y dejar reposar por 10 minutos.
Enseguida poner un plato encima del molde, sacudir ligeramente el molde y voltearlo cuidadosamente para que queden los duraznos arriba.
Dejar enfriar y servir.
Notas
Pueden también pelar los duraznos si así lo desean o si es más conveniente para ustedes.
El tiempo de horneado depende del tipo de horno que tengan, lo importante es que no abran el mismo en los primeros 30 minutos, después de esos pueden controlar la cocción del bizcocho usando un palillo que deberá salir limpio sin residuos para indicarnos que está listo.