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Los huevos rancheros son una de las especialidades mexicanas que se sirven principalmente como desayuno, este platillo que ha traspasado fronteras y popularizado mucho en todo el continente americano no es otra cosa que una base de tortilla frita con encima dos huevos estrellados bañados con una rica salsa de tomate. El acompañamento oficial son los frijoles fritos pero en algunas versiones se acompañan también con crema, queso fresco y tiras de chile poblano.
Durante mucho tiempo, en este país que me “impuso” despiadadamente su cappuccino y cornetto, dejé de desayunar huevos, pero ahora que ya sé que no se necesita estar en México para desayunar o comer casi igual, pues estos huevitos rancheros hacen su aparición de vez en cuando en nuestra mesa. Pero confieso, muy raramente para el desayuno porque casi siempre los preparamos para el almuerzo. Aquí el secreto es hacer una buena salsa que podemos adaptar a nuestro gusto en cuestión de picante.
Huevos Rancheros
- 4 huevos
- 4 tortillas de maíz
- 400 gr de tomates maduros
- 50 gr de cebolla
- 1 diente de ajo
- 1-2 chiles rojos
- Aceite extravirgen
- Sal y pimienta
Lavar los tomates y asarlos por algunos minutos en una plancha de cocina. Dejarlos enfríar y pelarlos, luego ponerlos en una licuadora junto con los chiles, la cebolla y el ajo al cual habrán quitado la cáscara y el brote interno. Agregar medio vaso de agua y licuar hasta obtener una salsa densa. En un cazo pequeño poner un chorrito de aceite de oliva y calentar, agregar la salsa y condimentar con sal y pimienta, dejar cocinar por algunos minutos (15 a fuego bajo) para que la salsa se adense un poco. Reservar en un lugar caliente.
En una sartén antiadherente calentar un poco de aceite, freír las tortillas pocos segundos por lado (NO deben quedar crujientes sino blandas). Quitarles el exceso de grasa con papel absorbente de cocina y acomodar una tortilla en cada plato.
Agregar un poco más de aceite en la sartén y freír los huevos.Untar las tortillas con un poco de salsa y acomodar sobre cada una un huevo frito. Bañar con más salsa y servir acompañados de frijoles refritos.
¡Que buenos! De estos platos que siempre apetecen.
Un beso.